sábado, 7 de junio de 2014

Taller sobre diálogo con hijos/as adolescentes, el 17 de junio!

Aquí les dejo la invitación al próximo taller para padres del 17 de junio.
Vamos a trabajar esta vez acerca del diálogo con nuestros hijos/as adolescentes.
¡Anótense!
( Les sugiero que lean para ayudar a su decisión de participar, el artículo anterior a este, llamado " Lo social/ LAS TRAMAS/ los talleres de reflexión" y/o el del 7-4-14," Para qué sirve participar de un taller para padres de adolescentes?")
Los/las espero!



lunes, 2 de junio de 2014

Lo social / LAS TRAMAS / los talleres de reflexión ...



                                                Por Mónica I. Rodríguez





El   lunes por la tarde, participé como colaboradora de un taller para padres en una escuela de CABA.
Un taller de reflexión suele ser un espacio en el cual los conceptos se trabajan desgranándolos, casi  como si se los  ” amasara”, hasta que llegan al punto de encuentro con las realidades más concretas que se pretenden tratar allí.
Así sucedió también en este taller, del cual me interesaría comentarles, el trabajo que se llevó a cabo con el por todos conocido y sinnúmero de veces redefinido, concepto de familia.
En uno de los momentos del desarrollo de su exposición, la coordinadora (1) pregunta a los padres y madres allí presentes: ¿Para ustedes, qué es una familia?
Una de las participantes suelta:- ¡Un conjunto de seres que se aman!- . Lo dice entre risas, quizá consciente de la simplificación implícita en su expresión (todos lo sabemos: los seres que se aman también discuten y tienen diferencias…)
Afecto, contención sueltan otros, y demás términos por el estilo: Hasta que quien coordina nuevamente toma la palabra y dice: una familia es una red de vínculos, un entramado; y menciona también que los miembros que forman parte de esa familia- entramado son sostenidos por- se sostienen en esa red. Grafica su explicación con un dibujito en el pizarrón que era más o menos así:
                                         .
Esta definición si se quiere simple, clara, directa, me despertó un grado de curiosidad suficiente como para seguir pensando en y a partir de ella.
Sus fundamentos teóricos pueden remitirse, entre otros conceptos, al de trama vincular humana de E. Pichon- Riviere, para quien el vínculo es una estructura compleja, multidimensional y absolutamente imprescindible, que permite que se constituya y sostenga nuestro proceso de subjetivación humana a lo largo de toda nuestra vida.
Creo que pensar a una familia como un entramado en el cual los miembros se sostienen entre sí a través de funciones diversas, abre a un enorme potencial de movilidad, ya que desde esta idea, una familia nunca sería algo que “ ya está”, sino que tal como cuando se realiza un tejido, primero se ponen los puntos, para luego empezar a entretejer la trama, y muchas veces se deshace parte de lo hecho para volver a hacerlo  y que quede mejor…
Para el diccionario, un entramado, es un conjunto de cosas materiales o inmateriales unidas o relacionadas entre sí. Puede ser un armazón de hierro o madera que sirve para sostener una obra de albañilería, un conjunto de ideas, sentimientos u opiniones que se entrecruzan en un texto, o como decíamos recién un determinado tejido de hilo, lana o algún otro material.
Una red visible que alude a esa otra red, invisible, o quizá no tangible, la de los vínculos humanos, que es la que aquí nos interesa.
El interés de resaltar el hecho de que sostenemos nuestra humanidad en/con/dentro de alguna TRAMA.
Tramas puede haber muchas. Así como hoy por hoy existen distintos modelos de familia, (biparental, monoparental ,reconstituida o ensamblada, homoparental… ) que conforman lo que suele llamarse la red familiar, existen otros entramados muy importantes, como lo son las relaciones de amistad por ejemplo, que en muchas ocasiones y momentos hacen las veces de familia en nuestras vidas.
 A su vez, la sociedad en la que estamos insertos conforma esa red como decíamos no tanto invisible pero sí intangible, en la que/de la que con mejores o menores recursos internos y externos intentamos sostenernos.
Un contexto que aporta o no lo suyo, ya sea que nos ofrezca “sogas” más frágiles o consistentes con las cuales entretejer.
En este sentido, cabría tal vez preguntarnos hacia que tiende respecto del armado de entramados nuestro contexto actual: ¿a la ligazón o a la desligazón de los  espacios vinculares y colectivos?
Ya que, según sea la respuesta que nos demos, podría desembocar o no en una siguiente reflexión: acerca de si convendría que desde nuestro lugar individual, contribuyamos de la manera que a nuestra creatividad se le ocurra, a todo aquello que tienda a recomponer y reforzar lo que ayuda a que se arme red-trama-vínculo en nuestra vida.
Es en gran medida este propósito el que anima y otorga sentido a esta propuesta de talleres de reflexión;un objetivo primordial, detras del cual se despliegan todas las posibles mixturas que al experto/a puedan ocurrirsele; en nuestro caso, trabajar juntos para entender más y mejor el complejo vínculo con nuestros hijos/as adolescentes. 
Y hacerlo a través de una red en la cual- de la cual sostenernos para no caer en estados de retracción solitaria y aislamiento, como así también una red humana, colectiva, SOBRE la cual caer ( en la mejor acepción que pueda ofrecer la palabra) cuando hace falta pensar, recuperarse y rearmar nuestra TRAMA.
Para nosotros y para los otros.

(1) La licenciada en psicología Claudia Abalos, coordinadora del taller, es autora del libro “ El taller, un dispositivo para el encuentro y la reflexión” de editorial La crujía, en el cual desarrolla ampliamente, entre otros, el concepto de redes y trama vincular..